Fruto de la amistad y de las ganas de formar una banda para hacer música nueva. Así de sencillo es como Daniel Ardura (Alado sincera, Sonio) y María Sáenz (Zapatotipobota, Come’n Wait) dan con Álex Canales (Atapuerca Beach, Buguibún) para formar Ensaña, cuyo primer álbum ‘Rosario de concesiones’ es casi un manifiesto estético. Toda una declaración de intenciones, donde despliegan un lenguaje propio con el que estiran las costuras del rock para adentrarnos en un mundo de música angular, bella y violenta que define al trío como único en su especie.
La música de Ensaña está hecha a partir de bases métricas de amalgama y con estructuras que van progresando de forma sorprendente, sin saber dónde te acabarán llevando… pero, al mismo tiempo, es eminentemente melódica y de una riqueza armónica excepcional. Durante el viaje, tenemos la sensación de estar inmersos/as en una especie de avant-rock de ensueño, donde se concatenan inusuales derivaciones contrapuntísticas que van tejiendo, a su vez, emocionantes consonancias entre las líneas, así como inducen a puntuales momentos de hermosa disonancia. En sucesivas escuchas, uno/a podría llegar a pensar que este tipo de composiciones quizás hayan sido concebidas más como artefactos musicales poéticos (y políticos, claro) o como objetos sofisticadamente punk, que como canciones al uso.
A esto último contribuye también que el discurso vocal de Ensaña no solamente transgreda las leyes de la narrativa lineal y disponga ante nosotros/as múltiples voces -desdoblamientos o puntos de vista- que se van entrelazando, complementando y respondiendo de forma concisa (ahora en la voz de Ardura, ahora en la voz de Sáenz, hay pasajes que incluso parecen abstracciones en off), sino porque además la propia voz se comporta como un instrumento explícito. Es decir, instrumento que emite palabras, sí, pero instrumento monofónico al fin (igual que el bajo, por ejemplo), cuya articulación melódica está casi siempre al servicio de una armonía ulterior, del todo. ¡Edificante escucha! Es verdad, no existe un disco como este en la actualidad -ni parecido- y mucho menos en castellano, pero lo importante es que ¡esto es solamente el debut! Nos encontramos ante una banda fascinante. Ante ese otro tipo de música que se antoja imposible describir con palabras porque, tal y como reza el segundo corte del disco, un pensamiento es más preciso.