Tras publicar un hermoso EP llamado ‘Fórmula’ el año pasado, Peña regresan ahora con éste, su primer trabajo de estudio titulado ‘Carreiro’. Un debut sorprendente que supone toda una revelación, no solo en términos de trascender lo folk, sino en cuanto a música contemporánea en gallego se refiere.
Asumiendo la propia dependencia gentilicia como punto de partida, la banda formada por Toño Magariños (diola, Unicornibot), Rubén Abad (Cro!, Trilitate) y Elena Vázquez (Trilitrate) ha sido capaz de hilvanar un cuerpo de canciones exquisito, que aúna sencillez con idiosincrasia y valentía formal. Pues, en ‘Carreiro’, la pulsión subconsciente de la música popular nos es representada de forma ampliada, armónicamente rebosante y extraordinaria.
Recibidos con tamaño muro de órganos en la apertura de ‘Burato’, acto seguido asistimos con emoción a la siega: ciclo de los prados, cuya litúrgica descripción parece encajar a la perfección con la métrica del tema. Pero no crean, la aparentemente enternecedora ‘Selva’ esconde cierta crítica al discurso eco-friendly superficial, así como en los 5/4 de ‘GPS’ uno se podría preguntar si –Estamos ata os collóns de estar sempre conectadas, ou non? (…). De un modo u otro, al final, nos queda la sensación de que el amor está presente en todas y cada una de estas canciones aunque, seguramente, ‘Bandeira’ sea la que mejor defina el disco. Un álbum que funciona a modo de nuevo regreso, de hipnótica llamada al hogar ulterior: Espacio familiar donde se proyectan imágenes de nuestra infancia, aunque en ellas descubramos algunos elementos sutilmente reordenaos… no todo está donde estaba.